El Método de Yoga Iyengar está basado en las enseñanzas del maestro Yogacharya B. K. S. Iyengar (India, 1918-2014) quien dedicó su vida al estudio, práctica y enseñanza del yoga. Este método de Hatha yoga ha demostrado y enseñado cómo se integran los ocho aspectos del yoga ashtanga ( yama, niyama, asana, pranayama, pratyhara, dharana, dhyana y samadhi)
BKS Iyengar es hoy en día uno de los yoguis más reconocidos de nuestros tiempos. Su estilo de enseñar yoga, que es ahora seguido por profesores titulados de todo el mundo, ha venido a llamarse “Yoga IYENGAR®”
El método se basa en el desarrollo de la percepción consciente y la integración de cuerpo, mente e inteligencia (emociones), compaginando un trabajo físico de gran intensidad y exigencia técnica con una actitud de serenidad y relajación dentro de este esfuerzo físico.
¿Cuáles son las características únicas que lo hacen tan efectivo?
1) La importancia en la ALINEACIÓN.
2) El TIEMPO adecuado en las posturas
3) Las SECUENCIAS correctas.
4) El Uso de SOPORTES cuando son necesarios
5) La aplicación TERAPÉUTICA de asana y pranayama en los distintos casos.
Precisión, Intensidad y Dinamismo
Es un método accesible para todos gracias al uso de los SOPORTES cuando son necesarios para cada constitución y para una mejor ejecución de las posturas. ( ver http://melyasana.blogspot.com.es/2010/11/los-soportes-en-el-yoga-iyengar.html)
• Prevenir lesiones de las cervicales en las posturas invertidas
• Aliviar dolores crónicos de columna, musculares, articulares, de tendones, etcétera.
• Cada alumno puede llegar a su límite personal de máxima extensión de los músculos y articulaciones comprometidos en cada asana.
• Los soportes pueden servir para el precalentamiento corporal.
• Ayudan a permanecer en la postura durante un tiempo más prolongado.
Este método pone especial énfasis en la atención, corrección y observación constante a los alumnos por parte de los profesores.
Beneficios del Yoga Iyengar®
El Yoga Iyengar® es espectacularmente efectivo a todos los niveles:
Físico, Mental y Espiritual.
Físico: fortalece piernas y brazos, aporta flexibilidad a la columna vertebral, mejora la circulación sanguínea y desarrolla la coordinación y el equilibrio.
Mental: Ayuda a calmar y serenar la mente, para que no sea nuestra mente divagante y desordenada quien nos conduzca a nosotros, si no nosotros a ella con total concentración.
Espiritual: Hace emerger alegría y paz de nuestro interior, y nos aporta las pautas para vivir en armonía con nosotros mismos y nuestro entorno. Todo esto no es posible con un yoga pasivo. El yoga Iyengar requiere fuerza de voluntad, lo cual merece la pena para que los beneficios se multipliquen de forma extraordinaria. Es una herramienta para mejorar en muchos aspectos, y lo más importante es que puede ayudarnos a ser mejores personas
¿Cómo son las clases?
En una clase de Yoga Iyengar, el alumno principiante desarrolla de manera progresiva la atención y percepción consciente, armonía e integración de cuerpo, mente y sentidos a fin de experimentar un estado de silencio, equilibrio y unicidad.
Se otorga un énfasis primordial al trabajo y estudio de tres de los miembros:
Asana (posturas)
Pranayama (control, de la respiración)
Pratyahara (interiorización de los sentidos)
Las clases se desarrollan de acuerdo a un programa sistematico, evolutivo y fácilmente asimilable. Durante las clases, la evolución de cada practicante es supervisada en todo momento con las observaciones y correcciones necesarias.
Es un yoga dinámico y, por lo tanto, donde hay dinamismo no se instala la pasividad, el profesor da constantes y precisas instrucciones a los alumnos, manteniendo con su atención una perfecta conexión entre cuerpo y mente (meditación en la acción), sintiendo en cada momento que son observados y corregidos adecuadamente.
¿Quién puede practicarlo?
El yoga Iyengar puede ser practicado por todos. Es adecuado para cualquier persona sin importar edad ni constitución física.
El sistema Iyengar se divide por niveles y cada persona se va adaptando con el tiempo a estos niveles
El yoga Iyengar® se practica sin música ni sonidos que perturben o hagan que la mente entre en estados mentales de ilusión, sólo la voz del profesor se hace patente en la sala con la tonalidad apropiada para cada secuencia de la práctica que se está realizando.
¿Qué necesitas?
- Ropa cómoda, preferiblemente pantalón corto o leggings,
- No haber comido al menos dos horas antes de comenzar la clase.
- Ser puntual.
- Informar si tienes algún tipo de lesión o enfermedad, tensión alta, operaciones recientes o si tienes la menstruación o menopausia.
BKS Iyengar es hoy en día uno de los yoguis más reconocidos de nuestros tiempos. Su estilo de enseñar yoga, que es ahora seguido por profesores titulados de todo el mundo, ha venido a llamarse “Yoga IYENGAR®”
El método se basa en el desarrollo de la percepción consciente y la integración de cuerpo, mente e inteligencia (emociones), compaginando un trabajo físico de gran intensidad y exigencia técnica con una actitud de serenidad y relajación dentro de este esfuerzo físico.
1) La importancia en la ALINEACIÓN.
2) El TIEMPO adecuado en las posturas
3) Las SECUENCIAS correctas.
4) El Uso de SOPORTES cuando son necesarios
5) La aplicación TERAPÉUTICA de asana y pranayama en los distintos casos.
Este tipo de yoga es el más incisivo en la correcta alineación postural del cuerpo sin olvidar la respiración con el fin de obtener los máximos beneficios de cada asana o postura.
La alineación de los huesos y articulaciones guía a un mejor equilibrio con menos trabajo de los músculos. De este modo uno gana más estabilidad en las posturas con menos esfuerzo.
La alineación correcta mejora la circulación, crea espacio interno (literalmente en las articulaciones) y trae un flujo energético equilibrado a través de todo el cuerpo que da salud y bienestar.
El método Iyengar
se caracteriza básicamente por tres puntos:
Precisión, Intensidad y Dinamismo
PRECISION:
para conseguir el correcto alineamiento y simetría en cada asana (postura).
INTENSIDAD:
para conseguir la máxima eficacia en el mínimo
tiempo (sin dureza ni agresividad)
DINAMISMO:
durante la postura se realizan todos los
detalles sin dejar que la inercia o la pasividad se instalen.
Estas tres cualidades potencian la rápida evolución personal del practicante, dan profundidad y amplitud de percepción y desarrollan lo que B.K.S. Iyengar llama "la inteligencia de las células".
La práctica correcta
de posturas te aporta:
·
Conciencia corporal, estabilidad, ligereza y firmeza del cuerpo;
·
Equilibrio, serenidad y claridad de la mente.
·
Previene y libera de enfermedades.
Característico de
este tipo de yoga es también el uso de soportes, tales como
mantas, bloques, cinturones, etc
para ayudar a acomodar
necesidades especiales, lesiones
o desequilibrios estructurales.
Su extraordinario aporte terapéutico y el
uso de soportes han
hecho que hoy en día sea probablemente el más
conocido y ampliamente practicado
sistema de Hatha Yoga.
Algunos de los Beneficios
Terapéuticos de los “soportes”:
• Flexibilizar la columna permitiendo superar su rigidez.
• Flexibilizar la columna permitiendo superar su rigidez.
• Prevenir lesiones de las cervicales en las posturas invertidas
• Aliviar dolores crónicos de columna, musculares, articulares, de tendones, etcétera.
• Cada alumno puede llegar a su límite personal de máxima extensión de los músculos y articulaciones comprometidos en cada asana.
• Los soportes pueden servir para el precalentamiento corporal.
• Ayudan a permanecer en la postura durante un tiempo más prolongado.
Este método pone especial énfasis en la atención, corrección y observación constante a los alumnos por parte de los profesores.
Se insiste sobre todo en el estiramiento y fortalecimiento muscular y en la respiración que ha de ser practicada con una constante atención mental.
El método Iyengar da unas pautas muy precisas para practicar el yoga con eficiencia y seguridad, teniendo en cuenta que la salud y el estado de la mente mejorarán con su práctica.
Beneficios del Yoga Iyengar®
El Yoga Iyengar® es espectacularmente efectivo a todos los niveles:
Físico, Mental y Espiritual.
Físico: fortalece piernas y brazos, aporta flexibilidad a la columna vertebral, mejora la circulación sanguínea y desarrolla la coordinación y el equilibrio.
Mental: Ayuda a calmar y serenar la mente, para que no sea nuestra mente divagante y desordenada quien nos conduzca a nosotros, si no nosotros a ella con total concentración.
Espiritual: Hace emerger alegría y paz de nuestro interior, y nos aporta las pautas para vivir en armonía con nosotros mismos y nuestro entorno. Todo esto no es posible con un yoga pasivo. El yoga Iyengar requiere fuerza de voluntad, lo cual merece la pena para que los beneficios se multipliquen de forma extraordinaria. Es una herramienta para mejorar en muchos aspectos, y lo más importante es que puede ayudarnos a ser mejores personas
¿Cómo son las clases?
En una clase de Yoga Iyengar, el alumno principiante desarrolla de manera progresiva la atención y percepción consciente, armonía e integración de cuerpo, mente y sentidos a fin de experimentar un estado de silencio, equilibrio y unicidad.
Se otorga un énfasis primordial al trabajo y estudio de tres de los miembros:
Asana (posturas)
Pranayama (control, de la respiración)
Pratyahara (interiorización de los sentidos)
Las clases se desarrollan de acuerdo a un programa sistematico, evolutivo y fácilmente asimilable. Durante las clases, la evolución de cada practicante es supervisada en todo momento con las observaciones y correcciones necesarias.
Es un yoga dinámico y, por lo tanto, donde hay dinamismo no se instala la pasividad, el profesor da constantes y precisas instrucciones a los alumnos, manteniendo con su atención una perfecta conexión entre cuerpo y mente (meditación en la acción), sintiendo en cada momento que son observados y corregidos adecuadamente.
¿Quién puede practicarlo?
El yoga Iyengar puede ser practicado por todos. Es adecuado para cualquier persona sin importar edad ni constitución física.
El sistema Iyengar se divide por niveles y cada persona se va adaptando con el tiempo a estos niveles
El yoga Iyengar® se practica sin música ni sonidos que perturben o hagan que la mente entre en estados mentales de ilusión, sólo la voz del profesor se hace patente en la sala con la tonalidad apropiada para cada secuencia de la práctica que se está realizando.
¿Qué necesitas?
- Ropa cómoda, preferiblemente pantalón corto o leggings,
- No haber comido al menos dos horas antes de comenzar la clase.
- Ser puntual.
- Informar si tienes algún tipo de lesión o enfermedad, tensión alta, operaciones recientes o si tienes la menstruación o menopausia.
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